Aunque no lo parezca, muchas pequeñas y medianas empresas están en la mira de los ciberdelincuentes. Y no es porque manejen millones, sino porque suelen tener defensas mucho más débiles. Un clic mal dado o una contraseña mal puesta puede abrir la puerta a un desastre que, en más de un caso, termina en cierre total del negocio.
Desde Afilico, te contamos cuáles son los errores más frecuentes en ciberseguridad que cometen las pymes y, lo más importante, cómo puedes evitarlos sin volverte loco ni gastarte una fortuna.
1. 🧠 Creer que “eso no me pasa a mí”
Uno de los errores más graves es pensar que por ser una empresa pequeña nadie va a fijarse en ti. Justo lo contrario: los atacantes saben que no sueles tener un sistema de defensa robusto, y por eso vas primero en su lista.
¿Qué hacer?
Cambia el chip. Aplica una política de “Zero Trust”, es decir, no confíes automáticamente en nadie, ni dentro ni fuera de tu empresa. Cuestiona accesos, revisa permisos y mantén a raya a cualquier visitante digital no invitado.
2. 🔑 Contraseñas flojas como gelatina
Las típicas claves como “admin123” o “empresa2023” son básicamente una alfombra roja para los hackers. Y si encima se comparten entre varios empleados, peor.
¿Cómo se soluciona?
Haz obligatorio el uso de contraseñas complejas y únicas. Combina letras, números y símbolos. Súmale autenticación multifactor (MFA), que añade una capa extra. Un buen gestor de contraseñas te puede ahorrar más de un susto.
3. 📩 Phishing: el anzuelo que muchos muerden
Los correos falsos siguen siendo el método favorito de los cibercriminales. Basta con que un colaborador haga clic en un enlace sospechoso para que toda la red quede comprometida.
¿Qué puedes hacer?
Entrena a tu equipo. Literalmente. Haz simulaciones, enseña ejemplos reales y premia la detección de intentos falsos. Además, utiliza herramientas que bloqueen correos peligrosos antes de que lleguen a la bandeja de entrada.
4. 🛡️ Confiar solo en antivirus gratuitos
Un antivirus básico puede ayudarte con lo mínimo, pero está lejos de ser suficiente ante las amenazas actuales como ransomware, spyware o troyanos camuflados en archivos inofensivos.
¿La solución completa?
Invertir en una protección seria. Nosotros recomendamos Kaspersky Premium. Incluye antivirus galardonado, VPN ilimitada, gestor de contraseñas, protección contra malware avanzado y soporte técnico remoto. Todo en uno.
Y por cierto: si usas este cupón exclusivo obtienes un 10% de descuento adicional en cualquier plan anual.
5. 💾 No hacer copias de seguridad
Si pierdes los datos de tus clientes, tus facturas o tus documentos internos y no tienes copia, no hay vuelta atrás. No es exageración, pasa más de lo que te imaginas.
¿La jugada inteligente?
Haz backups frecuentes. Automáticos. En la nube y también en un disco externo bien guardado. Y no olvides revisarlos cada tanto para asegurarte de que realmente estén funcionando.
6. 🧑🏫 Tener empleados sin formación
Tu equipo puede ser tu mayor defensa… o tu mayor debilidad. Si no saben identificar un engaño o si usan mal las herramientas, el riesgo se multiplica.
¿Qué hacer?
Incorpora la formación en ciberseguridad como parte del día a día. Desde lo básico (no abrir archivos sospechosos) hasta lo más avanzado (cómo actuar ante un ataque). Con una cultura de seguridad activa, reduces errores humanos y aumentas la protección.
7. 🛠️ No actualizar el software
Hay pymes que siguen usando versiones de software de hace 5 años. ¿Sabes cuántas vulnerabilidades han aparecido desde entonces? Muchas.
Solución directa:
Activa las actualizaciones automáticas en todos los dispositivos y programas. Haz auditorías mensuales para asegurarte de que no quede nada obsoleto en el sistema.
8. ☁️ Descuidar la nube
Subir documentos a la nube sin ningún tipo de protección es como dejar la caja fuerte abierta. Es cómodo, pero peligroso.
¿Qué puedes hacer?
Elige proveedores con cifrado avanzado y opciones de autenticación fuerte. Revisa quién tiene acceso a qué y configura permisos personalizados. No todo el mundo necesita ver todo.
9. 📋 No tener un plan para cuando algo sale mal
No tener un plan de respuesta es como conducir sin frenos. Cuando llegue el ataque (porque llegará), no sabrás cómo actuar.
Punto clave:
Define un protocolo claro: quién se encarga, cómo se reporta, cómo se aísla la amenaza y cómo se recuperan los datos. Y haz pruebas. Es mejor equivocarse en un simulacro que en un ataque real.
10. 🔍 No monitorear la red
¿Sabes qué pasa en tu red mientras duermes? Si no tienes monitoreo, lo más probable es que no. Y eso puede costarte caro.
¿Qué recomendamos?
Instala herramientas de vigilancia que detecten comportamientos anómalos. Si no tienes equipo interno para esto, considera servicios de monitoreo gestionado que lo hagan por ti.
🏆 Nuestra recomendación: Kaspersky Premium
Si estás buscando una solución integral, Kaspersky es una de las mejores opciones del mercado. De hecho, ha sido reconocido como Producto del Año por AV-Comparatives, superando a 14 competidores en pruebas de detección de malware, ataques dirigidos y rendimiento general.
Y lo mejor: tiene garantía de devolución de dinero de 30 días. Si no te convence, te lo reembolsan sin problema.
¿Te interesa? Adquiere tu plan aquí y no olvides usar el cupón Afilico para obtener un 10% de descuento extra.